Espíritu Libre: Metal & Hueso, muestra de Bruno Cafferata en El Camino – Moto Garage
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El diseñador, ilustrador y artista Bruno Cafferata presenta una docena de cuadros inspirados en su pasión motera. La expo va desde el 29 de noviembre hasta el 14 de diciembre.
A pocos días de presentar su muestra individual Metal & Hueso en El Camino – Moto Garage, lugar de encuentro de la comunidad motera del medio, conversamos brevemente con Bruno Cafferata para saber algo más del tema.
Bruno; ¿cuál es el eje temático de la muestra?
– El eje temático de esta muestra se centra en las motos; desde ahí es de donde parte esta propuesta que narra, en una docena de cuadros pintados con acrílico sobre lienzo, algunos, y sobre papel, otros tantos, la conexión del hombre y la máquina, sus anhelos de libertad y de sentirse vivo teniendo el «control» sosteniendo un timón al viento y a toda velocidad.
Eres ilustrador, artista plástico, diseñador y motero por añadidura, ¿cuánto tiempo llevas en este mundo, Bruno?
– Unos 15 años y debo confesar que siempre quise tener una Harley Davidson, era un sueño de toda la vida, las veía rugiendo y me repetía, ¡algún día!
¿Cómo te iniciaste en el mismo, con qué moto?
– Compré una Bobber de 350cc, china, por auténtica necesidad; realmente el tráfico diario para ir al trabajo me estaba matando, los audífonos ya no bastaban y quería calidad de vida.
¿Qué moto tienes ahora?
– Finalmente, pude cumplir mi sueño; ahora manejo una Harley Davidson Sportster Iron 883 del 2010.
¿Cómo podrías emparentar o relacionar tu pasión por las motos, la música, la ilustración y la pintura?
– El arte está muy ligado a las motos, la estética, el diseño, la personalización de cascos y tanques, hay cosas impresionantes visualmente.
Cuando viajas en moto aprecias los paisajes con la cara al viento, te mimetizas con el entorno; no podemos comparar esta experiencia, por ejemplo, a ir en avión, podría decir que ahí no viajas, solo llegas al destino, la vivencia es muy distinta. Desde mi punto de vista, diría que algunas motos requieren la misma apreciación que la pintura y la música, son parte de una forma muy personal de vivir la vida. Y de crear.
